domingo, 20 de agosto de 2017

LA VIDA SECRETA DE LOS SUEÑOS II ¿POR QUÉ Y PARA QUÉ INTERPRETAR SUEÑOS?

LA VIDA SECRETA DE LOS SUEÑOS II
¿POR QUÉ Y PARA QUÉ INTERPRETAR SUEÑOS?

     Con alguna frecuencia en la vida cotidiana, tal vez en una fiesta o en un café uno conoce a una persona que te dice: “Ya que tú eres psicólogo interprétame este sueño”. O también le podrán decir a uno: “Ay! Anoche soñé con Petra, ¿Qué querrá decir eso?” esa es la visión tradicional y cotidiana de la interpretación de sueños. Pues, permítanme decirles que la técnica de interpretación de sueños dista bastante de los objetivos que generalmente se forman las personas.
     Hay que contextualizar, la interpretación de sueños es una técnica TERAPEUTICA, la interpretación de los contenidos psicológicos inconscientes debe ayudar al paciente a “darse cuenta” de cuál es su problema  y de cómo debe resolverlo. En psicología se dice. “Toda interpretación fuera de contexto es una agresión”. Esto va muy en relación con las personas que sin ser psicólogos tienen la costumbre de “analizar” a los demás y a hacerles interpretaciones de su conducta. La “Interpretación” ayuda al paciente a darse cuenta de los contenidos inconscientes que de otra forma, la persona por sus propios medios no podría hacerlo. En ese caso el terapeuta “devela”, en la acepción más prístina de la palabra de “quitar velos”, esto es  “aclara” para que el paciente pueda darse cuenta de su problemática. El objetivo sigue siendo el triunfo de la conciencia, que cada vez más nos “demos cuenta” de los que hacemos, y de cómo lo que hacemos nos mete en problemas.




     Por ello, Laing decía que la psicoterapia consistía en “darse cuenta de lo que no nos damos cuenta”. Las personas que han hecho psicoterapia refieren: “es que yo hacía las cosas y no me daba cuenta”. Por ello toda la psicoterapia se dirige a favorecer la conciencia del paciente y que desarrolle “conciencia de problemática”. En este sentido la interpretación de sueños se inscribe en este objetivo y persigue decirle al paciente algo que él no consigue por sus propios medios entender. Mi maestro en la poesía William Osuna me decía. “No se trata de decirlo más bonito, se trata de decirlo”. La metáfora en la poesía tiene esta función, por eso las metáforas combinan variables que de manera formal no podrían combinarse. Decía el mismo William Osuna:
“Esta mañana me encontré a mi padre
con el bolsillo desinflado
y el corazón más alto que una casualidad”
la metáfora combina la variable altura con la variable azar, que racionalmente no son pertinentes, pero de forma irracional, como son las metáforas y como son los sueños, si se pueden combinar y dan un mensaje claro que el poeta y el terapeuta entienden y que se lo hacen saber al paciente a través de la interpretación, en este caso de los sueños.





     Por ello no se trata de traducir el sueño como si estuviera escrito en un idioma que el paciente no conoce, pero que si conoce lo que está escrito. Tal vez como si el paciente escribiera en ruso, y conscientemente escribe algo en ruso, pero de repente olvida el idioma ruso y busca un traductor (que sería el terapeuta) para que le “traduzca” lo que él ya sabe pero que ha olvidado los códigos para leer. No, no se trata de eso. Se trata de que eso que quiere decir el sueño está escrito en un lenguaje que el paciente no conoce, el lenguaje onírico del inconsciente, y va a decir algo que el paciente tampoco conoce. Muchas veces lo que esta significado en el sueño no  es aceptado de buen grado por el paciente. Son contenidos que por ser muy duros para el paciente son reprimidos y pasan al inconsciente. Por eso no se puede interpretar sueños en una fiesta ni en un café, sino que tiene que ser en una atmósfera terapéutica que trate de ayudar al paciente a salir de un problema que tiene y que esta decidido a hacerlo, porque por eso paga y asiste a muchas sesiones de consulta. Un sueño interpretado en una fiesta puede acarrear que el interpretado diga: “Noooooo, tú lo que estás es loco. Yo creo que el loco eres tú! Porque los mecanismos de defensa, los mismos que mandaron ese contenido al inconsciente, comienzan a actuar y comienza la negación. “yo no tengo problemas, los problemas los tienen los demás”.
     Cuando nos disponemos a conocer nuestro inconsciente, cuando hacemos psicoterapia,  tomamos la decisión de que lo que vamos a conseguir debemos aceptarlo, así no nos guste.  Tal vez la mejor ilustración de esto es la que nos da los cuentos de hadas. El viaje interior también es conocido  como el “Viaje heroico”. Se trata del “Héroe”, que somos nosotros mismos, que está dispuesto a emprender la aventura de su vida. “Conócete a ti mismo y conocerás a los dioses” como decían los griegos, y que durante ese viaje va a conocer hermosas doncellas (que son parte de uno mismo, la parte linda y va a enfrentar dragones (que también son parte de uno mismo, la parte horrible).




     Entonces el sueño aparece con su lenguaje surrealista que combina variables aparentemente inconexas, que no conoce estructura temporal ni espacial y nos da un mensaje a descifrar como un tesoro a desenterrar. Es una aventura maravillosa emprender ese viaje heroico de autodescubrimiento. Cuando terminemos ese viaje, definitivamente, no vamos a ser los mismos que iniciamos el viaje, seremos más sabios, más maduros, nuestra piel se verá más curtida por el sol del camino y nuestro traje tendrá polvo y guardaremos con orgullo las heridas de guerra. De esa guerra que libramos contra nosotros mismos y en la que tuvimos un arma maravillosa para ganar, los sueños.

Dr. Roger Garcés
Psicólogo Clínico
Centro Multiservicios Bellas artes

04168276258

sábado, 19 de agosto de 2017

LA VIDA SECRETA DE LOS SUEÑOS




LA VIDA SECRETA DE LOS SUEÑOS

     Desde tiempo inmemorial se concibe  a los sueños  teñidos de misterios, esa actividad que ocurre al dormir en la que ya no somos ni los guías ni los que lo rigen. Los sueños no nos hacen caso y se presentan de las formas más inverosímiles y surrealistas. También se sabe desde tiempo antiguo que  los sueños conllevan un mensaje, la biblia nos cuenta la historia de José interpretó al Faraón o los que cada mañana interpreta el chamán de la comunidad indígena al grupo antes de salir a trabajar. Desde siempre se intuye que los sueños son algo más que las audaces escenas oníricas que aparecen en las noches y que muchas veces nos resultan incomprensibles.




     Algunas explicaciones se han dado al respecto. Desde la psicología ha habido varios abordajes sobre los sueños. Freud decía que los sueños eran “La vía regia al inconsciente”. Para el psicoanálisis el inconsciente es esa parte del psiquismo que es el verdadero motor de nuestras vidas y de nuestra conducta. Todo lo que hacemos está gobernado por una parte de nuestra mente que no conocemos y es justamente en los sueños que esa parte se revela y resulta de una ayuda magnífica en la terapia y para la resolución de conflictos. Por eso en el psicoanálisis la técnica de interpretación de sueños es fundamental. Es recomendable que la interpretación sea realizada por un terapeuta cualificado para así poder sacar el máximo de provecho a la técnica y la terapia sea más expedita.
     Perls, quien ha desarrollado la moderna Gestalt, decía que en los sueños todas las partes son uno mismo. Todos los elementos del sueño representan partes de la personalidad muchas veces desconocidas por nosotros mismos. El análisis de los sueños desde la Terapia Gestalt deviene en una ayuda maravillosa para el crecimiento interior de la persona y para la resolución de los conflictos que han sido el motivo de consulta del cliente.






     Pero es Carl Jung quien hace un abordaje alucinante e inmensamente heurístico con respecto a los sueños. Jung incorpora el concepto del “Inconsciente colectivo”  en oposición al concepto tradicional del inconsciente personal propuesto por Freud. En el Inconsciente Colectivo se guarda la memoria cultural de toda la humanidad, de manera tal que todos tenemos en nuestro inconsciente los vestigios de todos los dioses de toda la humanidad. Estos rasgos que caracterizan a lo que la humanidad ha llamado dioses se llaman “Arquetipos” y es justamente en el inconsciente colectivo donde se están los arquetipos que se manifiestan en los sueños. Por ejemplo, ese principio femenino que implica el amor es llamado afrodita por los griegos, Freya por los vikingos, Venus por los romanos, Ochum por la religión Yoruba, etc. El rasgo característico, el arquetipo, es el amor.  El sueño arquetipal se caracteriza porque es de corta duración pero de alta intensidad, es un sueño que se vive plenamente y que impacta profundamente al sujeto que sueña, quien puede recordar ese sueño en forma sumamente vívida durante años. Jung además incorpora la noción de sueños premonitorios que responden al principio de sincronicidad.





     Lo que si queda claro y nadie discute es que los sueños, envueltos en esa atmósfera misteriosa y surrealista, representan una herramienta poderosísima en la psicoterapia. En algún momento de la terapia nos damos cuenta, como escribía Shakespeare que “La vida está hecha del mismo material con que están hechos los sueños”. Por eso cuando interpretamos la realidad ponemos mucho de nosotros en esa interpretación, de ahí que “Mirar es otra forma de soñar”.  
En próximas entregas hablaremos más profundamente de la vida secreta de los sueños.

Dr. Roger Garcés
Psicólogo Clínico.
0416 827 6258
Centro Multiservicios Bellas Artes