lunes, 18 de agosto de 2014

TALLER: LA ABUNDANCIA Y EL COMPLEJO DEL DINERO. 20 de septiembre de 2014

        TALLER: LA ABUNDANCIA Y EL COMPLEJO DEL DINERO



OBJETIVO:

Crear las condiciones psicológicas para generar abundancia. Que los Usted sepa  cómo las creencias y la autoestima  determinan la abundancia monetaria. Que identifique los saboteos internos para conseguir la abundancia.

¿QUÉ GANARÁ USTED HACIENDO ESTE TALLER?

Que conozca las leyes y principios de la abundancia
Que conozca y maneje el complejo del dinero
Que identifique y maneje en su personalidad los elementos negativos del complejo del dinero, y potencie los positivos.

TEMARIO:

1)      Desarrollo de la conciencia de abundancia. Principio  de sincronicidad.
2)      Minimizar la mente de la pobreza. El apego. Necesitar Vs. Querer
3)      Psicológicamente,  qué es el dinero. La dicotomía del dinero: Sagrado / Sucio. La relación del dinero con el amor y con la creatividad; el dinero es una forma de poesía.
4)      Diseñar un plan personal para favorecer la aparición de la abundancia de acuerdo a nuestras verdaderas necesidades.
5)      Identificar qué cosas debemos cambiar y qué cosas debemos desarrollar, y cómo controlar nuestros saboteos internos

LUGAR Y FECHA:     Centro Uruguayo Venezolano.  Salón Zitarrosa.       20 DE SEPTIEMBRE

INVERSIÓN:                  Bs. 1.200    DURACIÓN: 6 horas de 8:00 am   a   2:00 pm
DICTADO POR:           Lic. Roger Garcés. Psicólogo Clínico. Psicoterapeuta.

CONTACTOS:        
                                   https://www.facebook.com/paaliviarelalma

Escriba a enelrespiramos@gmail.com y recibirá toda la  información para las inscripciones o ponga un mensaje a


0416 827 62 58     Lic. Roger Garcés

secretaria de C.U.V. 0212  234 03 17


miércoles, 6 de agosto de 2014

VALAR MORGHULIS IV. El proceso de la muerte




VALAR MORGHULIS IV

EL PROCESO DE LA MUERTE


     En este ensayo vamos a pasearnos por algunos abordajes que dan cuenta del proceso de la muerte. ¿Qué pasa cuando nos morimos? ¿Tenemos conciencia de ello? ¿Podemos voluntariamente hacer algo luego que dejemos de respirar para que nuestra muerte sea fructífera?
     Espero que al final de la lectura tengamos una actitud ante la muerte más enriquecedora, más armónica y menos ansiógena.  A continuación reseñaremos algunos abordajes en este respecto:

LA RESURRECCIÓN DE LA CARNE DEL CATOLICISMO.

     La iglesia católica afirma que después de la muerte y en el día del Juicio Final, habrá la “Resurrección de la carne”. La iglesia también afirma que a la segunda venida de Jesucristo todos los hombres resucitarán con los mismos cuerpos que han tenido en vida. De hecho en el “Credo” se reza: “Creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia Católica, la Comunión de los Santos, el Perdón de los Pecados, la Resurrección de la carne y la Vida Eterna”.  La doctrina cristiana sostiene que no hay que temerle a la muerte ya que ésta es el momento más importante de nuestra vida dado que es la oportunidad de acceder a la “Vida eterna”, y ésta es la promesa principal y sustento de la fe cristiana.



     Antes de llegar a la  “Vida Eterna” se pasa por un período de purificación que ha sido dado en llamar “El Purgatorio”, éste es un “Dogma de fe”; es decir, de creencia obligatoria. La palabra “Purgatorio” no aparece como tal en la Biblia, su descripción y sustento está en  2 Macabeos 12, 40-41  y en 1 Cor. 2, 13-15. Se dice que las almas que llegan al purgatorio ya están salvas, y que la única opción que tienen es ir al cielo, ya que al infierno no pueden ir por haber sido purificadas justamente en el mismo purgatorio.

LA NUEVA ERA.

     Resulta paradójico pensar que el pensamiento de la llamada “Nueva era” ya tiene cerca de 100 años. Bailey  fue seguidora de los trabajos de  Madame H. P. Blavatsky, connotada investigadora en teosofía y esoterismo, y fue justamente Alice Bailey quien con sus escritos dio impulso a este movimiento que hoy es conocido como “Nueva era”.  Esta autora ha escrito un ilustrativo libro titulado: “La muerte, una gran aventura”, en el mismo se refiere el proceso de la muerte como un paso dimensional que nos conecta con nuestro propio yo o “esencia divina” también conocido como el “Yo superior”.
En este libro se refiere que la muerte no es un acontecimiento desgraciado y que nos depara un sinfín de aprendizajes de los que se desprenden las técnicas para “Bien morir” en los que se hace un paralelismo del proceso de la muerte con el proceso del sueño.  El entrenamiento que podamos lograr teniendo al sueño como herramienta de aprendizaje nos faculta para que en el verdadero proceso de la muerte se logren realizar las tareas adecuadas y necesarias para una próxima y bienaventurada reencarnación.
            




     Sin dudar refiero al lector interesado a consultar la fuente original de “La muerte, una gran aventura”. No vamos a profundizar en este respecto, solo vamos a mencionarlo por la inmensa importancia que tiene, pero explicarlo aquí representaría un largo esfuerzo.

EL BUDISMO TIBETANO Y EL BARDO.

     De los abordajes acerca del proceso de la muerte el que más despierta la atención de este suscrito es el del Budismo Tibetano por considerarlo más cercano a la psicología. El budismo refiere que  cuando la conciencia se desprende del cuerpo en el momento de la muerte, ésta entra en un estadio transitorio que se llama Bardo. Lama Jimpa señala que existen varios tipos de bardos o períodos intermedios:

a) El período intermedio de la vida, que va desde el nacimiento hasta el inicio de la muerte.
b) El periodo intermedio dela muerte, que va desde el inicio de la muerte hasta su conclusión.
c) El periodo intermedio dela esencia de la realidad que ocurre justo después de la  conclusión de  la muerte. d) El periodo intermedio del devenir o de las posibilidades que va desde el momento de la esencia de la realidad hasta el nuevo renacimiento.

      En realidad la muerte es un periodo intermedio más, así como lo es la vida.
     Lama Jimpa también explica que en el proceso de la muerte se comienza perdiendo el elemento Tierra, este se disuelve en el elemento Agua. En esta primera disolución se pierde la vista. En segundo lugar el Agua se disuelve en el elemento Fuego, aquí se pierde la audición y se siente una inmensa sed. En tercer lugar el fuego se disuelve en el elemento Aire, en esta fase se siente un inmenso frío y puede haber visiones de humo. Por último el Aire se disuelve en oscuridad, es el momento en donde falla la respiración.

     Es de hacer notar que en todo momento la conciencia permanece activa, solo que va a estar presente en otras realidades de la existencia. Por ejemplo luego de las disoluciones la conciencia se va a encontrar con la naturaleza de la conciencia o la naturaleza de la mente en la que, y una vez dominada esta naturaleza, el sujeto aporta las condiciones para una reencarnación armoniosa.

     La duración de la vida la determina la duración del Karma. El karma es ese mecanismo que está determinado por la Ley de Causa y Efecto por el que recibimos las consecuencias de nuestros actos. En el proceso   de la muerte es donde tiene mayor importancia la Ley del Karma, ya que es donde las consecuencias de nuestros actos se muestran con más rapidez. Si asumimos la muerte con miedo, esa será la condición que domine en nuestra reencarnación. Esto se cumple para las diferentes emociones que podemos tener al momento de la muerte tales como ira, tristeza, dolor, etc.  Por eso es bien importante ir al proceso de la muerte con una actitud ecuánime y esto se logra con la meditación. Con la meditación aprendemos a no engancharnos con pensamientos ansiógenos y pues claro, la meditación la aprendemos en vida, por eso la vida sigue siendo un periodo de transición o bardo, o como es llamado también periodo de “oportunidades”. En vida tenemos la oportunidad de entrenarnos para tener una buena muerte, y en todo caso, si  esto no fuese real, (recordemos que hay 50 % de posibilidades de que exista vida después de la muerte), nos ayuda a vivir la vida de forma más plena y más enriquecedora. Por eso afirmo que el abordaje del budismo tibetano, además de ser muy hermoso, es el que está más cerca de la psicología.



     Como vemos, en el budismo tibetano, entrenarse para la muerte es entrenarse para la vida. La oportunidad que nos da la meditación para identificar a través de la observación los errores que cometemos nos da la posibilidad de enmendarlos. El conocimiento de la ley del Karma nos da la herramienta para transformar esos errores. El karma es una semilla que sembramos y que florecerá tarde o temprano, con este conocimiento podemos avizorar que las cosas que hacemos tarde o temprano nos traerán consecuencias, por eso es tan importante actuar correctamente. Si ese entrenamiento para la muerte nos hace tener una vida más gozosa y más armónica, entonces sea bienvenido ese entrenamiento que aunque siendo para la muerte nos sirve para la vida.



     Ante lo inevitable de la muerte y sus enriquecedoras enseñanzas nos despedimos con las palabras que nos son conocidas

                              VALAR MORGHULIS
                             (Todo hombre debe morir)




Dr.  Roger Garcés
PSICÓLOGO
0416 8276258
psicogarces@gmail.com