El sí mismo se imagina a sí mismo.
Es una sentencia de los Vedantas, que es una doctrina
filosófica de por lo menos 2.500 años que enuncia una de las joyas de sabiduría
más certeras y descriptivas de la naturaleza del ser; El Sí mismo se imagina a
Sí mismo. Esa parte tan íntima de uno mismo que refiere donde se es
verdaderamente uno. Donde no hay comparación posible con el otro y donde se
preparan los sueños es el Sí mismo o el Self como como la llamaba Jung. El Self
es esa parte de uno que piensa en cómo deberíamos ser, o qué debemos
desarrollar o qué deberíamos aprender. En todo caso, es esa parte muy, muy íntima de uno mismo
donde se es uno mismo.
Entonces, cuando
el Sí mismo se imagina a Sí mismo, quiere decir que nosotros continuamente nos
estamos soñando, imaginando, inventando y reinventando. Ese auto-concepto que
tenemos de nosotros que solamente compartimos con el terapeuta o con un amigo
muy cercano, es lo que construye nuestra realidad para que legitimemos
precisamente ese concepto que tenemos de nosotros mismos. Es decir, si yo
pienso de mí mismo que soy una víctima, mi inconsciente me hará elegir
situaciones en donde salga perjudicado y se cumpla la sentencia de que
efectivamente soy una víctima. Y esto ocurre porque tenemos el PODER de
soñarnos, tenemos el poder de imaginarnos y esto hace que nos comportemos según
la imagen que tenemos de nosotros mismos.
Si es verdad que
el Sí mismo se imagina a Sí mismo, entonces tenemos a nuestra disposición una
herramienta valiosísima para cambiar nuestra vida. Debemos comenzar por cambiar
la manera cómo nos vemos y en su lugar poner una mejor imagen de nosotros. Para
saber cómo nos vemos simplemente debemos ver nuestra realidad y ver qué es lo
que estamos viviendo. Debemos observar qué papel estamos tomando en nuestras
situaciones y asignarnos un nuevo papel de acuerdo a la nueva imagen que tengo
de nosotros mismos. Es decir si yo
imagino que soy débil entonces debo imaginarme a mí mismo como alguien a quien
esa debilidad no le afecta. No debemos imaginar el polo contrario sino la
superación del problema. Lo que debemos saber
es que nosotros nos comportamos como nos soñamos, por tanto debemos aprender a
soñarnos distinto.
Lic. Roger Garcés
PSICÓLOGO CLÍNICO
Centro de Medicina Hiperbárica y Rehabilitación.
Telf. 0212 451
83 75
Caracas